Pude leer en Nuevo Accion un comentario de Waldo Fernandez y me parecio que escribio desde el fondo de su alma un dolor que muchos llevan dentro, por eso me decidi a comentar sobre ello.
Aunque a algunos le ha molestado la opinión de Waldo Fernández Marakas, demostrando exactamente lo que él dice, creo que son muchas las verdades expresadas y aunque nos duela y estoy seguro que lo escrito por Waldo viene exactamente de ese mismo dolor que muchos sentimos y tenemos temor de expresar, por miedo a que sea realidad y la Cuba soñada sea solo eso, un sueño y un recuerdo de un pasado que difícilmente volverá en nuestras vidas.
Señores, no acabamos de entender, el intercambio cultural se está realizando, de los Estados Unidos viajan artistas a Cuba, realizan sus actividades como manda la ley y sin escándalo y revuelo regresan a acá y punto, quisiéramos que los artista que vayan a Cuba sean los nuestros, los del patio, los que toman café en cualquier esquina, pero no acabamos de entender que para el intercambio cultural con Cuba esos artistas no son americanos aunque le llenen el pecho de medallas colgadas por el mismo Presidente y si por una casualidad el gobierno de los Castros permite que alguno del patio vaya, seguro que no serán esos que siempre han condenado al régimen en la palestra pública, Uds. saben a quienes me refiero.
Como dice muy bien Waldo, nadie puede amar lo que no conoce, ese es el caso de los jóvenes que aquí llegan, no conocieron la Cuba de ayer porque no la vivieron, los padres y abuelos llenos de miedo permitieron que el régimen les cambiara la historia y el silencio cómplice produjo estos jóvenes de hoy, que muchos todavía defienden el proyecto castrista olvidando los sacrificios que sus propias madres fueron sometidas. Muchos de esos jóvenes no acaban de llegar y ya quieren volver a Cuba cargados de pacotilla haciendo despliegue de una riqueza que no existe, pero si como una prueba contundente de lo que significa vivir en libertad y bajo la libre empresa aunque ellos mismos no se den cuenta.
Triste es ver a muchos de esos jóvenes defender inconscientemente o concientemente a un sistema que los esclavizo y esclaviza a sus familiares, que condena a los suyo a ser pordioseros y mendigos de por vida, es duro ver como muchos de ellos olvidando las noches que sus madres pasaron haciendo una cola para poder comprar un juguete básico y dos adicionales para que el tuvieses un juguete el Día de Reyes, las colas y empujones que sus madres tuvieron que hacer para que el comiera algo decente o para comprarle un par de zapatos y un pantalón, ligera es la memoria cuando se quiere borrar de la mente un país destruido y no tener el valor para condenar a los culpables.
Waldo, mucha razón tienes al decir que la Cuba de ayer no volverá, no volverá porque los cubanos de ayer no volverán, porque los nuevos cubanos no les interesa ningún cambio real, porque los pocos opositores que se han rebelado de verdad están rodeados de otros opositores que solo les interesa sobrevivir y recibir ayuda del extranjero, la mayoría de los cubanos se han acostumbrado a las remesas y los envíos que hacemos desde acá y no tienen el menor interés de producir un cambio, los demás viven de lo que inventan para que los que reciben remesas les compren, así es lamentablemente, si estoy equivocado que me expliquen cómo es posible con tanto disgusto como dicen que existe la oposición no crece y no es un factor de importancia para el régimen, porque si lo fuera ya hubiese sacado de Cuba a todos los que se meten al movimiento para conseguir una visa y de esos han salido muchos que al llegar acá se les quito el impulso.
Waldo, como yo he dicho muchas veces y tu lo dices en otras palabras, el gobierno que le da las visas a estos artistas para venir aquí no quiere saber o no le importa la verdad, es sencillamente lo que dice mi estribillo, los americanos son buenos vecinos, pero malos amigos.
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