martes, 19 de noviembre de 2013

El paredón cibernético.

Siendo pequeño cuando al principio de la Revolución fui a vivir a la ciudad de mis padres y abuelos (Holguín), me llamo la atención como todavía a un par de años de ese triunfo todavía se veían grupos airados en las calles, dando gritos y lanzando al aire consignas revolucionarias, pero lo que se me quedo grabado para siempre era la palabra “PAREDÓN”, nunca me pude explicar ni nadie me explico en ese momento que significaba “PAREDÓN”, con el tiempo y al descubrir su significado, entiendo el motivo por el que  nunca le explicaron a ese niño que era “PAREDÓN”. 

Fui creciendo con la Revolución, esa misma Revolución que muchos ayudaron a su  triunfo y sin poderme explicar veía que eran detenidos y condenados a prisión, otros cercanos a mi familia y todavía vistiendo los brazaletes del 26 de Julio, se reunían en mi casa y decían cosas que los niños no pueden entender, pero el tiempo hizo que penetraran en mi mente y quizás sean la razón de cómo soy, recuerdo todavía como mis nuevos amiguitos de juego, se iban para el país del que yo me fui, no entendía, ¿Qué voy a entender?, menos podía entender ver en la televisión como un pueblo gritaba “PAREDÓN “a un grupo de cubanos que desembarcaron por una playa(cosas de niño, ¿verdad?).

Recuerdo una vez en el noticiero de las ocho, con Manolo Ortega, como la gente en La Habana rodearon una iglesia y la policía sacaba a empellones a un hombre que lo acusaban de robarse un avión o algo así y gritaban “PAREDÓN “luego con el tiempo y siendo ya mayor supe que era Betancourt, mi niñez y juventud fue siempre acompañada de esa triste palabra, creo que la última vez que escuche en Cuba “PAREDÓN” fue durante el juicio a Guerreo, un ex oficial del ejército constitucional de la Republica que había escapado de prisión y prefirió batirse a tiros con la policía que caer preso nuevamente, sin balas y herido, fue llevado a juicio y nuevamente escuche “PAREDÓN” de las voces de gentes que ni conocían sobre este caso, pero fueron complacidos, una vez más el “PAREDÓN” reclamaba sangre cubana.

Sería casi imposible exponer todas las veces que escuche “PAREDÓN”, en todas las formas posibles y ahora lejos de Cuba y a una distancia grande en el tiempo me doy cuenta que ha surgido otra forma de “PAREDÓN”, la tecnología y las redes de comunicación han traído consigo las mismas malas costumbres y la intolerancia aumentada muchas veces, pues llegan mucho más lejos que los viejos gritos y alaridos en la calle pidiendo “PAREDÓN”, ahora llegan más lejos y más profundo, promoviendo la confusión y la desinformación, el nuevo “PAREDÓN” es el “PAREDÓN CIBERNETICO”.

Me ha sorprendido ver como algunos, con una historia libertaria y de lucha democrática  tan insignificante y descolorida por no decir tristes y oportunistas, tomando papeles de liderazgo otorgados simplemente por sus propios caprichos y deseos de figurar, salen a condenar, a acusar, a denostar sin control alguno, a personas que simplemente tienen sus opiniones y con una trayectoria patriótica y de lucha intachable, emborronan cuartillas queriendo justificar sus hechos intolerantes y falta de respeto, personas que si algunas vez hicieron algo para combatir al régimen castrista ahora hacen un favor al mismo al querer censurar y opacar a voces probadas en esta larga lucha sencillamente porque esas personas no se suman al sainete que nos quieren pintar o simplemente no están de acuerdo con algo o con alguien. Estos adalides de la libertad, auto fabricado en el exilio, me traen a la memoria aquellos que un día machacaban las calles de Cuba gritando “PAREDÓN”, la mentalidad y el servilismo es el mismo de aquellos acusadores de antaño que gritaban ¡VIVA FIDEL! Y  “PAREDÓN”.

Estos modernos expertos en democracia a su forma, hacen como el avestruz, aunque el avestruz me merece más respeto, pues es un pobre animal sin conciencia ni alma, que al esconder su cabeza en la arena cree que todo va a cambiar a su favor, estos censuradores, se dedican a navegar las redes y perseguir a los que haciendo uso de la libertad expresan sus ideas y opiniones, llegan lejos cuando además de querer dictar lo que se tiene de escribir o decir, te acusan de traidor, te amenazan que te van a “borrar” de sus amistades o sencillamente de llevan a su “PAREDÓN PRIVADO” y te entierran en su cementerio cibernético y privado también. Estos personajes llenos de ira y malos deseos condenan tanto al mensaje como al mensajero y lo mas irrisorio y tristemente patético es que te dicen muy airados: ¡TE BORRE DE MI LISTA!, como si su perfil o blog o grupo fuese el único o el mejor, cuanta arrogancia acompañada de ignorancia.


Quizás este pequeño comentario y que pudiese ser bien largo, pues imbéciles cibernéticos sobran, me de la oportunidad para ser “BORRADO DE ALGUNA LISTA” o a lo mejor me condenan a un “PAREDÓN CIBERNETICO”, no me asombraría, pues he sido fusilado varias veces, creo que los que pierden son los censuradores, a veces es mejor estar solo que en malas compañías, yo nunca he “BORRADO” a nadie de mi lista, los dejo estar presentes para que sus hígados se cocinen en su propia bilis, que me fusilen no me importa y creo que a esos amigos que han sido atacados y borrado de algunos lugares deben de estar felices y más ligero de lastre, pues como he dicho muchas veces, no me detengo a tirarle piedras a todos los perros que me ladran, solo le tiro piedras al perro que no ladra, pero aspira a morder.

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